Sunday, 9 December 2018

DON’T WASH CHICKENS!



Campylobacter.

In the United Kingdom there is a warning that reads ‘DON’T WASH’ on the packaging used for chickens.

The reason behind this warning is the bacteria Campylobacter.
This bacteria causes the majority of food poisoning.
It is usually found in poultry, mainly in chickens, turkeys and ducks and it easily transferred to humans through the handling of raw meat. It is also present in beef, non-pasteurised milk and water in a much lower quantity.

The Campylobacter has an incubation period of 3-10 days and its symptoms are:
  • Diarrhoea, which can sometimes contain blood.
  • Abdominal pain.
  • Headaches.
  • Fever.
  • And in a small proportion, vomiting. 
The symptoms are cured between three to four days, however it can lead to death in small children, elderly people, people with an immunodeficiency and people that have chronic conditions.
One of its most important side effects is the Guillain-Barré syndrome, which causes a range of symptoms including leg paralysis.

The World Health Organisation (WHO) has issued a health warning regarding this bacteria, which according to the Food Standards Agency, in the United Kingdom alone has caused 280.000 cases and 100 deaths each year.
n 2010, Campylobacter was found in 77% of samples taken from chickens in the European Union and in 86% of samples taken in the United Kingdom.

TREATMENT
  • Hydration - Replenishing water and electrolytes through an oral rehydration solution.
  • Antibiotics - Only to be taken in cases where it is required to do so.
PREVENTION
Prevention starts in manufacturing and continues through to when it reaches the consumer.

WARNING!
Chickens should not be washed, especially in the United Kingdom, where 44% of people tend to do it on a daily basis and risk spreading the bacteria through the drops of water that come into contact with clothes.

The person that touches raw meat needs to wash their hands thoroughly and with soap, along with all the utensils that were used to prepare the meat such as knives, chopping boards, etc.

This is the key step in preventing the contamination and the spreading of the bacteria.

Dr. J. Hurtado Martínez
Medical Director of HealthSalus

¡NO LAVAR EL POLLO!



Campylobacter.
En el Reino Unido hay una advertencia en todos los envases de pollo donde pone que ‘QUE NO SE LAVEN’

La razón de esto es, el Campylobacter.
Esta bacteria es la causa más importante de gastroenteritis alimentarias. Encontrada habitualmente en las aves, fundamentalmente en el pollo, pavo y pato, se trasmite al ser humano fácilmente por la manipulación de la carne cruda. Está también presente, aunque en menor cantidad, en la carne de ternera, leche no pasteurizada y agua.

El Campylobacter tiene un período de incubación de 3-10 días y sus síntomas son:
  • Diarreas, a veces sanguinolentas.
  • Dolor abdominal.
  • Cefaleas.
  • Fiebre.
  • Y en menor proporción, vómitos.
Normalmente se resuelve el cuadro en dos o tres días, pero a veces en niños pequeños, ancianos, inmunodeprimidos o enfermos crónicos puede provocar la muerte.
Uno de sus efectos secundarios más graves es el Síndrome de Guillain-Barré, que produce parálisis de las piernas, entre otros síntomas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dado una señal de alerta sobre esta bacteria que solo en Reino Unido, según la ‘Food Standards Agency’ causa 280.000 casos y más de 100 muertes al año.
En el 2010, se encontró el Campylobacter en el 77% de las muestras tomadas de pollos en países de la Comunidad Europea y en el 86% de las muestras tomadas en el Reino Unido.

TRATAMIENTO
  • Hidratación - Reponer agua y electrolitos con suero oral.
  • Antibióticos - Solo en los casos en los que sea necesario.

PREVENCIÓN  
La prevención comienza desde la manufacturación hasta que llega al consumidor.

¡ADVERTENCIA!
Nunca se debe de lavar el pollo, sobre todo en Reino Unido, donde la  mitad de las personas lo hacen habitualmente con el consiguiente riesgo de expandir la bacteria a través de las gotas de agua que saltan a la ropa.

El lavado de las manos de la persona que toca la carne cruda tiene que ser riguroso y con jabón, al igual que todos los utensilios utilizados como cuchillos, tabla de cocina, etc.

Este es el paso más importante para evitar la contaminación y expansión de la bacteria.

Dra. J. Hurtado Martínez
Directora Médica de HealthSalus