Saturday 1 April 2017

INTOXICACIÓN ALIMENTARIA. LO QUE DEBEMOS SABER.

La intoxicación alimentaria es una de las patologías más frecuentes en el Reino Unido así como en el resto del mundo.

Generalmente la contaminación de los alimentos es debida a toxinas, parásitos o bacterias; las más comunes son las producidas por la Salmonella, E. Coli, Clostridium Difficile, Estafilococos, etc.

SÍNTOMAS

Los síntomas son diarreas, vómitos, dolor abdominal y en casos más graves, fiebre.

La fiebre es el signo que nos indicará la presencia de una bacteria más agresiva, dando décimas en intoxicaciones leves, a fiebre alta en intoxicaciones más graves; estas últimas requerían incluso tratamiento antibiótico, previo cultivo  de las heces.

PREVENCIÓN

La prevención en las infecciones alimentarias es clave:
  • El mantenimiento en frigorífico de carnes, pescados, verduras y alimentos.
  • No cortar la cadena de congelación de los alimentos, es decir no volver a congelar lo previamente descongelado.
  • Cocinar bien los alimentos, sobre todo pescados y carnes.
  • Lavarse bien las manos siempre antes de tocar cualquier alimento y antes de comer.
  • Lavar la verdura fresca meticulosamente.
  • Lavar bien los utensilios, sobre todo si han sido previamente utilizados para cortar carne o pescado.

TRATAMIENTO

En el tratamiento destacaremos para una recuperación rápida y efectiva la hidratación y reposición de iones.

La hidratación es realizada a través de suero oral; normalmente viene preparado en sobres y es fundamental para los niños, no obstante aquí detallamos una forma sencilla y fácil para prepararlo, para los que no tengan acceso a ellos:
  • Se le añade a un litro de agua embotellada (o en su defecto agua bien hervida) una punta de cuchillo de sal, otra de bicarbonato, un limón escurrido y azúcar al gusto.
Se toma frío para ser mejor tolerado; debe de ser tomado a lo largo del día, en pequeñas cantidades, y cada diez minutos, aumentando la dosis paulatinamente. A las 24 horas se podrá comenzar una dieta blanda, basada en puré de patata o zanahoria, arroz cocido, pechuga de pollo a la plancha, caldo de pollo, merluza cocida o en caldo, tostada de pan con aceite, manzana, etc.

En los niños pequeños el suero se dará de la siguiente manera: una cucharada pequeña cada cinco minutos en la primera hora, una cucharada grande cada diez minutos en la segunda hora, y cuando tolere más, se les dará mayor cantidad y más espaciada en el tiempo. Su dieta blanda será basada en arroz como cereal, pollo y merluza en forma de puré como otros alimentos, aunque los niños serán un capitulo aparte.

Por último decir que los microorganismos viven siempre con nosotros, nos compete buscar la mejor forma de defendernos de ellos.

Dra J. Hurtado Martínez
Directora Médica de HealthSalus

No comments:

Post a Comment